Mantén una rutina diaria con horarios establecidos para comidas, siestas y momentos de juego. La consistencia es clave para el bienestar emocional del bebé.
Observa el comportamiento del bebé, ya que cada uno es único y tiene su propio ritmo de desarrollo. No te preocupes si no sigue exactamente los tiempos recomendados.
No dudes en pedir ayuda si lo necesitas. Criar un bebé es una tarea desafiante, y contar con apoyo emocional y práctico es importante para el bienestar de toda la familia.